Realmente no aconsejamos este hotel porque el precio no justifica la calidad de las habitaciones que ofrecen (200 mil pesos colombianos), no estaba limpia, las paredes sucias y deterioradas, los tendidos viejos, el desayuno no estaba incluido, la atención de la recepción no es 24 horas, no había señal de televisión, la conexión a internet es inestable y a las habitaciones del segundo piso cualquier persona puede tener acceso desde la calle, es un lugar inseguro y todo está muy hacinado. Lo único medianamente positivo es la ubicación, muy cerca de la plaza principal y de la calle real. En conclusión fue una estadía muy desagradable, no volveríamos a hospedarnos allí ni lo recomendamos.
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