アルベルクトレ・デル・バロー - ホステル(Alberg Torre del Baró - Hostel)

Mi estancia ha sido muy buena. En varias paquinas de búsqueda del alojamiento está mal indicada la hora de la entrada. Es a las 17h. Pero el dueño ha sido muy amable y se ha resuelto el problema ( porque hemos venido mucho antes). No somos habituales clientes que utilizan este tipo de alojamientos y no sabiamos que hay que llevar ropa de la cama consigo. Pero no hay problema se alquilan sábanas por 3€. Las camas cómodas, sin ruido (estábamos solos en la planta), la piscina es un gran plus a la ola de calor. Admiten mascotas. Muy buen precio en pleno agosto. El entorno no se puede mejorar. Gracias hemos estado a gusto.

estuvimos un fin de semana un grupo de 26 personas, la*****taciones bien, aunque justas de higiene. El baño antiguo y sin ningun mantenimiento. dos baños y dos duchas or planta (con duchas rotas, falta de racholas o en mal estado y cortantes, suelos estropeados y manchados...). El exterior poco cuidado, materiales oxidados, zonas peligrosas por nulo mantenimiento pero lo que se lleva la palma fue la comida. nefasta. habiendo reservado con tiempo nos ofrecia dos primeros y dos segundos pero de dos de los platos siempre avisaba que tenia tres o cuatro unidades, aquarius "tengo cuatro para todo el fin de semana". comida pesima (pasta pasada y agria, calamares rebozados de bajisima calidad, fritos refritos, todo vino frio los dos dias, el vino abierto, etc... el trato del señor que lo lleva tambien deja mucho que desear, la amabilidad, empatia y simpatia brillan por su ausencia. lo mejor, el entorno y la piscina. ojala el señor aprendiese de las críticas y de porque los platos volvian a cocina practicamente como salian... que poco esfuerzo por ser minimamente aceptable unos menus. al final una familia de 4 miembros pagó por una noche en albergue y pension completa 240e inadmisible para lo que ofrecen