Bonito y acogedor comedor de un hotel rural. Pocas mesas, cinco el día que fuimos. Opciones de carta y de menú, con dos primeros y dos segundos a elegir, postres varios, café y agua. Incluyen una botella de vino de denominación origen Rioja o Ribera o Somontano. Nos decantamos por el menú, podemos aseverar que estaban muy buenos cualquiera de las opciones elegidas, carne y pescado de segundo. Trato amable y servicio ágil. A pesar de ser menú nos dieron un aperitivo de croqueta y un preparado a base de zumo de naranja y licor. Muy interesante opción para comer bien, sin agobios.
自動翻訳