Un lugar paradisíaco donde qued**** en pareja o familia. A nosotros nos encantó todo, la comida riquísima, la atención de primera. Nos quedamos en una de las Casitas de campaña y realmente es la opción que aconsejo a todos, lo más típico y coqueto. Traigan su proprio repelente para los mosquitos porque hay muchos, a nosotros nos ayudó poner una vela en la mesita de noche y pudimos descansar tranquilos. También las piscinas muy lindas y limpias, en fin todo perfecto. Volveremos pronto con amigos.
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