旅先の様々な魅力を発見したいお客様に、Motel L Hammarby Sjöstadは最適です。Motel L Hammarby Sjöstadは、ビジネスでもレジャーでも、ストックホルムでの快適な滞在をご提供いたします。Stockholms Södraから3km、ブロンマ空港から16kmと、交通便利な場所にあります。最寄の主要公共交通機関はスカルマールブリンク駅で、当施設から1kmです。付近のエリアは、フォトグラフィスカやLuma Park、ソードラ劇場など、観光名所が豊富なことで有名です。お時間に余裕があるお客様には、館内の様々な施設でお過ごしいただくのもお勧めです。お車をご利用のお客様は、ストックホルムの当施設提供の駐車場をご利用いただけます。
This contemporary hotel caters to families as well as budget-conscious tourists. The Sure Hotel by Best Western Stockholm Alvsjo is located in Alvsjo, South of Stockholm, near Stockholm International Fairs and the Alvsjo railway station, from which the center of Stockholm is about a 10-minute rail journey away. From this station you can catch the direct train to Friends Arena. There is also a bus leaving from this station to Globen. The hotel features 85 rooms, all in one floor! The latest technology is incorporated into the hotel. All hotel rooms and public areas feature wireless Internet access free of charge. There is a guest computer with printer access available in the lobby.
La estancia en el Unity Hammarby Sjöstad de Estocolmo ha resultado ser una pesadilla. Lo único bueno de la estancia fue cuando abandoné el establecimiento tras hacer el check-out. ¡Nunca más! No se dejen asombrar por las fotografías oficiales que puedan ver publicadas de este Unity. Entras en la habitación el primer día y ya encuentras polvo en la habitación. Por cierto, la estancia solo ventila por una pequeña ventana de difícil acceso al lado de la cama, a la que solo puedes subir por un lado. Solo puedes abrir la ventana subiéndote a dicha cama, lo cual es peligroso especialmente si tienes problemas de movilidad o eres una persona mayor, pues la cama está alta además. Para más inri, no limpian la habitación en ocho días, y en ocho días no cambian las toallas, que son pequeñas y de pésima calidad. De todo esto no te informa la reserva que haces en Booking, ni tampoco el personal del Unity cuando llegas y haces el check-in. La suciedad se acumula en la habitación con el paso de los días y hasta aparecen bichos, voladores y no voladores. Hay suciedad hasta en el horno, que ya es el colmo. No recogen la basura, ni te dan bolsas de basura de repuesto para usar. Con el papel higiénico ocurre igual: se acaba y te tienes que espabilar, porque solo te encuentras al llegar dos rollos (uno ya empezado, por cierto). Hablas con la mujer de la limpieza para que por lo menos entre y te barra el suelo, y no lo hace. Hablas con recepción y te sueltan que son las normas del Unity, de lo cual te enteras en ese justo momento. El desayuno es pobre y tienes que tomar, sí o sí, lo siguiente: bocadillo de pan mal cocido, tres o cuatro trozos de melón/piña (no más), un yogur y un dulce. Nada más, no puedes repetir. Si tomas un segundo dulce, como me pasó, una empleada llamada Cecilia te pide de manera autoritaria que se lo devuelvas. El zumo de naranja se acaba antes de las 9.30 horas de la mañana. Entonces Cecilia echa en el dispensador un litro más de zumo y lógicamente van tres personas y se vuelve a agotar; así hasta el día siguiente. Hablando de Cecilia (habla español, es morena, de pelo rizado recogido en una coleta y con gafas), el último día de mi estancia ella estaba al lado de su compañero que me hizo el check-out. Cuando me vio se puso al otro extremo del mostrador a mirar el móvil porque era perfecta conocedora de lo disgustado que estaba. El chico me preguntó que qué tal la estancia y yo le respondí que había sido una decepción, un desastre, y que Cecilia podía explicarle los motivos, pues mi inglés no es fluido. Él se limitó a decir que no hablaba español y Cecilia, en lugar de acerc**** a echarnos una mano, le habló en sueco para que no me enterara de nada, salió del Unity y desde la ventana vi cómo montó en un patinete y huyó disparada calle abajo. Puede que acabara su turno (porque eran las 7 de la mañana), pero cuando se tiene un mínimo de profesionalidad y otro mínimo de buena fe te quedas a colaborar y a ayudar a los clientes que te pagan el sueldo